En francés, porque simplemente me lo pide el alma, sólo es algo que quiero hacer. Un poquito de memoria genética puede ser.

En inglés, porque se debe, si es que queremos ser entendidos. Es, lo que manda la norma.

Con música, porque me ayuda a sentirte mucho más cerca.

Cuatro idiomas repiten una y otra vez el mismo "Minicuento", el quinto se pasea entre todos ellos. La misma historia contada con distintas cadencias. La misma historia imaginada de diferentes maneras y al final, por más que lo intento, no puedo incluirnos en los fotogramas de esta pequeña novela musical.

Sólo nos imagino por la mañana, con el olor del café "recién colado", pijamas blancas, piernas al aire y obteniendo una dulce sonrisa tuya de aprobación: "hey, qué buena esta canción, me siento como en un avión".

Aunque trate de ubicarnos aquí porque es una canción muy hermosa (que sé que te gustará por ser parte de esa "música rarita" que alimenta mi espíritu "demasiado europeo"), aunque tenga exactamente los idiomas que nos afectan y aunque he inventado 7mil argumentos, no, no es nuestra canción. Nuestra historia es un dulce minicuento, que no ha dejado de escribirse...

[Ninguno se irá del otro]